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miércoles, 25 de mayo de 2011

Hace ya mucho tiempo... (reflexiones postelectorales)

Ahora que las elecciones han pasado y los diferentes grupos políticos  andan pacta que te pactaré, desdiciéndose de lo dicho  y tiro porque me toca, no puedo remediar soltar unas cuantas cosillas que probablemente a alguno no le van a gustar (lo cual es muy sano), pero sintiéndolo mucho es lo que pienso (que también es muy sano).

 Y ahora que están avisados los navegantes, vamos al turrón:

Hace ya mucho tiempo que vengo pensando y diciendo que hay ciertos valores que no pertenecen a ninguna ideología en particular y sin embargo aún hay quien se empeña en apropiárselos por la cara y porque yo lo valgo. Así sin más. Y por si no queda claro me refiero a valores como igualdad (que nada tiene que ver con paridad, porque una cosa es ser iguales y otra muy distinta ser pares), progreso, libertad, honestidad y otras hierbas de la misma familia.  

Hace ya mucho tiempo que terminó la Guerra Civil y que Franco dejó de andar bajo palio o bajo cualquier otro adminículo. Hace ya mucho tiempo que la mayoría de nuestros abuelos fueron llamados a filas por los de uno u otro bando en función de quien llegase antes al pueblo de turno (vamos, que en la mayoría de los casos la cosa dependió de una mera cuestión de ubicación, porque en general la gente no tenía ni puta gana de ir a una guerra que no entendía del todo). Hace ya mucho tiempo que al abuelo de mi mujer lo enterraron bajo un árbol como a un perro o a mi abuelo le voló media mano una bala perdida (cada uno en el bando que le tocó). Hace ya mucho tiempo que mi abuela se jugaba el pescuezo por darle de comer a un infeliz echado al monte por culpa de un vecino que le había denunciado "por rojo" por ni se sabe qué antiguas rencillas familiares. Hace ya mucho tiempo que se rebanaron pescuezos por ir a misa y por no ir.

Hace ya mucho tiempo que los españoles tuvimos una ocasión de oro para superar viejas rencillas (hoy lo llamamos "Transición"). Hace ya mucho tiempo que las cosas estaban medio calmadas y parecía que por fin habíamos pasado página con mayor o menor fortuna.

Y sin embargo parece que seguimos igual que siempre, con los mismos discursos que dividen la sociedad en rojos o fachas y punto pelota. Con dirigentes políticos o aspirantes frustrados a serlo que tienen los santos redaños de poner en duda el intelecto ajeno por no haberles votado a ellos, con gente de uno y otro palo rebosando bilis por las comisuras porque "los suyos" no han arrimado cebolleta o porque la han arrimado a base de bien.

Y metidos en siglas concretas,  si el PSOE se ha caído con todo el equipo tendrá que reflexionar muy seriamente sobre cuales han sido  las razones  y aplicarse una sanísima dosis de autocrítica renovación y barrido de alfombras. La gente no ha votado otras opciones  porque hay crisis sino por la manera de afrontarla y gestionarla. Por el exceso de prepotencia y de incompetencia demostrada por muchos cargos públicos, con un plus de idiotez e indigencia intelectual incomensurables en el caso de algunos (y algunas) de ellos. Porque la burbuja inmobiliaria empezó a gestarse en los primeros años 80 y todos los gobiernos participaron y se revolcaron en ella disfrutando más que un gorrino en un charco hasta que todo reventó. Porque quienes han estado en el gobierno central y por tanto han tenido la responsabilidad de gobernar en sus manos han sido ellos y lo que habría pasado en el caso de estar los otros se queda en el terreno de la especulación. 

Porque Mariano y los suyos han estado muy cómodos esperando a que las cosas se cayesen por su propio peso y acojonados por si a ZP le daba por adelantar elecciones y les tocaba a ellos el marrón. Porque en este santo país seguimos pensando que la responsabilidad de darnos a todos un curro una casa y un buga guapo en la puerta es de Papá Estado. Porque el esfuerzo y el espíritu emprendedor parece que queda sólo para los imbéciles. Porque los que no pisan cabezas ni lamen traseros ni tienen padrinos no salen adelante ni por equivocación. Porque todos aspiramos a ser funcionarios y no puede ser. Porque habría que lavar mucha conciencia empresarial y sindical. Porque ahora que mucha gente ha salido pacíficamente a la calle a gritar ¡Basta! todos han intentado arrimar el ascua a su sardina de una u otra manera haciendo proselitismo barato

Y del mismo modo, que los vencedores tengan claro que no están ahí por méritos propios sino por errores ajenos y aún así  habrá que darles en justicia el menguadísimo beneficio de la duda. Pero que les quede clarito que ahora les toca a ellos mover ficha y no nos podemos permitir que nos coman y nos manden para casa porque va a estar muy complicado sacar un cinco para poder salir de nuevo al tablero.

Porque todos estamos hartos de que jueguen al parchís con nosotros, pero a la vez estamos  muy ocupados en escupirle en el ojo al vecino porque piensa diferente aunque esté tan jodido como nosotros mismos y lo hayan parido por el mismo sitio. Y no terminamos de entender que eso conviene sólo a unos pocos que son los que se han enriquecido con todo este lodazal.

Porque HACE YA MUCHO TIEMPO... que somos así y parece que no tenemos remedio. Ya veremos...


sábado, 21 de mayo de 2011

Spanish Revolution, o la esperanza resumida en un plano.

Levantarse por la mañana, hacer las tareas domésticas entre otras lindezas mundanas, conectarse al facebook y encontrarse con esto, es como para alegrarse el día y por extensión la vida:

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Que la gente normal, la de a pie, la que compra en el Dia, en la panadería de la esquina y en la carnicería de Manolo, la que sabe lo que cuesta un café y un pincho de tortilla, a qué huele el Metro o lo que es no llegar a mediados de mes sea capaz de organizarse de esta manera y sin liarse a palos es, cuanto menos, emocionante.

Estamos hablando del "pueblo organizado" de forma pacífica y enfrentándose a un sistema que no sirve a nadie mas que a aquellos que lo han puesto a su servicio en nombre de la democracia a tiempo parcial, el amiguismo o el prevaricato selectivo en función del grado de compromiso con la secta.

Del pueblo frente a aquellos que llevan demasiado tiempo reviviendo a los dos gañanes de Goya midiéndose el lomo mutuamente a garrotazo limpio, de los que viven de rentas retóricas y lejanas, de quienes no han tenido ni conocido  ocupación ni beneficio al margen de la política enroscados en cargos de confianza, en escaños temporales sobre el papel y vitalicios de facto, de quienes han pretendido convertir en un coto privado supuestas virtudes y categorías morales que no merecen ni siquiera nombrar.

En definitiva, del "PUEBLO" en el sentido más amplio frente a los verdaderos antisistema que no son, ni más ni menos, que aquellos que se lo han llevado todo calentito sin que hasta ahora nadie les haya plantado cara de verdad. No se si serán ciertos los rumores sobre supuestas manos negras que mueven los hilos y financian todo esto desde la sombra. Creo que no es así. Y si lo fuera, los que están  en la sombra se van a quedar sin circo porque les han crecido los enanos, el tragasables se ha hecho alérgico al metal,  y el hombre bala y la mujer barbuda, que se llevaban a matar,  se han liado la manta a la cabeza y se han mudado a vivir juntos a la Plaza Mayor del pueblo más próximo que, por si no se han fijado en el plano, hasta tiene zona infantil, información, WC, comedores, logística y zona de descanso.

Si en uno de los buques insignia de la prensa oficial del Imperio como es "The New York Times" la palabra más buscada es "Spain" es que algo se está cociendo. Ojalá los españoles hagamos historia de nuevo sin soltar un solo mamporro más allá de las oportunas coces en forma de sobre electoral que cada cual estime oportunas. Y es que no creo en eso de las "dos Españas" más que nada por cuestiones aritméticas. Sumando así a ojo, a mí me salen mil y pico y parece que por fin casi todas saben lo que NO quieren, que no es poco.

Que ustedes lo reflexionen bien.



martes, 17 de mayo de 2011

Idiotez, botox y neuronas solitarias

Hacendado y anonadado  me hallo. No se puede llevar con decencia que después de cenar te cuenten en las noticias de la noche que a una pendeja residente en el Imperio de Su Graciosa Majestad ("graciosa" sí que es, hay que reconocerlo), le han retirado la custodia de su hija de ocho años por ¡Inyectarle botox! Lo juro por Tutatis y si no, que el cielo caiga sobre mi cabeza.


La interfecta en cuestión le metía a su hija un chute de  toxina botulínica cada 3 meses, según sus propias palabras, "para ayudarle a convertirse en una estrella". ¡Y se siente orgullosa por ello! Pero lo más escalofriante es lo que dice la niña:   "cada noche compruebo si tengo más arrugas y si veo alguna quiero más inyecciones" (¿He dicho ya que es una niña de ocho añitos?). Ya no es que haya que retirarle la custodia a la  "Mamá Mengele", es que hay que condenarla a formarse un poquito empezando por la colección completa de Barrio Sésamo que imagino que es la literatura  más densa que podrá digerir el cerebro de este espécimen


Por decencia, la imagen de la niña aparece pixelada aunque se
puede encontrar en cualquier periódico digital.
"Lo de la izquierda" es la "orgullosa" mamá
La mameluca en cuestión (con todo el respeto para los mamelucos), de profesión esteticista, se compraba el botox y todo el instrumental necesario para "ayudar a su nena" por Internet, que como todos los anormales mononeuronales saben es el lugar ideal para adquirir medicamentos, toxinas, ántrax, Rolex de oro macizo y otras golosinas con total confianza. Con un par. 


Y por más que trato de comprenderlo no lo consigo, miren ustedes. No tengo ni idea de qué horribles traumas infantiles puede tener esta estúpida profesional, pero seguro que haría falta una legión de psicólogos, tres furgonetas de reparto de psicotrópicos y un palé de camisas de fuerza tan solo para  hacerle un apaño.


Definitivamente la naturaleza de sabia tiene muy poco, o de lo contrario este tipo de piltrafa  humana carecería de capacidad reproductiva (¡Huy lo que he dicho! Lo borraría pero no me funciona bien el teclado). Mire señora: inyéctese gasofa de 98 octanos en la laringe, tráguese un Zippo encencido y conviértase usted solita en toda una estrella ardiente, que eso sí que mola. Y deje ya de envenenar a su hija con sus neurastenias de Barbie frustada de todo a cien de polígono ¡So Pendeja!



sábado, 7 de mayo de 2011

Familia monomarental, parida monumental.

Les traigo la  parida de la semana amiguitos. En la ya acostumbrada línea filosófico-lingüístico-progresoide de tasca cutrona que campa por sus respetos en los ambientes políticos, nos han regalado otro hermoso "palabro" que viene a enriquecer el ya de por sí amplio acervo hispánico. Ahora resulta que las familias monoparentales no son políticamente correctas y por lo tanto, en aras de la igualdad más igualitaria que te cagas, pasan  a denominarse, agárrense al sofá,  "familias monomarentales".

El argumento para la invención del palabro que nos ocupa no es otro que el hecho de que la mayoría de las familias antes llamadas de forma errónea y fascista-leninista "monoparentales" están formadas por una mujer con cargas familiares (generalmente hijos, personas mayores, un cuñado con mucha  jeta, perro, canario o en los casos más extremos una combinación de dichos elementos).

 La cosa es que en el programa electoral de un partido de no recuerdo qué lugar de la geografía celtibérica, el aspirante o la aspiranta a la alcaldía anuncia a bombo, bomba, platillo y platilla de la que defeca la ratilla "ayudas para familias monomarentales" porque así se entiende mejor. Se ve que al electorado hay que darle las cosas masticaditas para que las entienda.  Eso sí, que nadie se alarme porque en el caso de que al frente de la familia monomarental esté un hombre, también podrá optar a las ayudas prometidas aunque sea un asqueroso ente de género masculino, que para eso somos iguales.

No tengo ni idea de quien ha sido el genio o la genia responsable del engendro, pero lo que está claro es que debería pedir que le devuelvan a sus padres (y a sus madres) los cuartos que hayan pagado por su educación porque está claro que el timo de la estampita se queda en una simpática broma o chanza por simple comparación.

No se crean que es tarea  fácil buscar un problema donde no lo había. ¡Qué va! Es curioso que para resolver una supuesta desigualdad haya que generar otra, aunque solo sea en el plano lingüístico. Que alguien me lo explique, por favor. Y es que parece que el sentido común indica que lo de monoparental no tiene mucho que ver con "un solo padre" sino más bien con "un solo pariente".

Los romanos, que de esto del  latín sabían un huevo, denominaban a sus respectivos progenitores como "pater" y "mater" pero, curiosamente, al conjunto de ambos lo denominaban "parentes", término a su vez relacionado con  "parire", esto es, el "acto de parir" capacidad esta última reservada exclusivamente, hasta donde yo conozco, a las mujeres e incluso a algunas "mujeras".

Así que, mira tú por donde, igual resulta que lo de "monoparental" no era nada machista aunque a los sesudísimos y sesudísimas autores y autoras de la gilipollez se lo pudiera parecer. Están locos estos romanos y romanas.

En definitiva, que me da en la nariz que vivimos inmersos en un mar de mamonadas (y para ser igualitarios, también de paponadas). Así nos va y de inocentes tenemos muy poquito.

A ver si entre todos ahorramos para regalarles una goma y que se borren con ella del mapa o en su defecto la usen para no procrear por si acaso la idiotez se hereda.